En los 11,122 kilómetros de costas mexicanas existen 860 sitios activos de buceo en los que trabajan 264 operadores turísticos que ofrecen servicios de esnórquel y buceo, y cuya derrama económica es similar a la que hace la industria pesquera nacional. Según datos del 2017, la pesca ribereña e industrial en conjunto aportaron alrededor de 700 millones de dólares al PIB mexicano. El proyecto de investigación reveló que, tan solo en el 2019, el segmento turístico subacuático contribuyó con unos 725 millones de dólares a la economía de México; $455 millones del total fueron generados por empresas pequeñas.